En la jornada de ayer el Movimiento de Afectados por las Represas de Brasil (MAB) denunció a través de un comunicado que el Gobierno brasileño volverá a la carga para retomar el proyecto de construir el Complejo Hidroeléctrico Binacional Garabí-Panambí, localizado en el río Uruguay, entre ese país y Argentina.
En dialogo con FM 89.3 Santa María de las Misiones, Eduardo Luján, integrante de la Mesa Provincial No a las Represas, recordó que “hace 25 años atrás fue el ‘No a Corpus’, hace 3 años atrás fue el ‘No a Garabí’ con un plebiscito contundente donde más del 90% de los misioneros dijeron que no quieren más este tipo de obras. Pero sin embargo se insiste con el lobby de las empresas, con la necesidad de generar riquezas para unos pocos y grandes daños para la mayoría, como es lo que ocurre habitualmente con este tipo de construcción”.
La represa de Garabí es una obra que está proyectada hace muchos años y que siempre ha tenido una resistencia muy fuerte de toda la población ribereña del río Uruguay, pero a pesar de ello los diferentes gobiernos siguen insistiendo con llevar adelante esta obra.
“El ‘no’ ha sido contundente y permanente, pero lamentablemente vuelve a surgir, se vuelve a poner en cartera el tema. Todavía tenemos una esperanza de que la justicia brasileña continúe con el fallo que tenía hasta ahora, pero vuelve a surgir la presión del gobierno sobre estás cuestiones“, lamentó.
Precisamente, este miércoles 28 está previsto que el Tribunal Regional Federal de la Cuarta Región (TRF4), en Porto Alegre, se expida sobre un pedido de apelación hecho por el IBAMA (Instituto de Medio Ambiente brasileño) y las firmas Eletrobrás y União contra la decisión que impide realizar los estudios para la construcción de la represa.
“Fue la misma justicia la que dictaminó que los impactos que produciría sobre toda la zona de las reservas naturales que hay cercanas de Brasil al río Uruguay, y sin embargo apelan ese fallo“, cuestionó Luján.
En ese sentido, el integrante de la Mesa Provincial No a las Represas indicó que de ser necesario saldrán a manifestarse en las calles. “Esperemos que no, son épocas muy difíciles para pedirle a la gente que salga a la calle, y esperemos que no sea esa la intención de, aprovechar estas circunstancias por parte de las autoridades, pero indudablemente si hay que hacerlo lo volveremos a hacer“.
“Hemos sido siempre muy cautos, muy prudente, hemos tratado de dialogar con todo el mundo, hemos tenido reuniones con algún gobernador en algún momento, hemos tenido reuniones con montón de funcionario con intendentes, y nuestras marchas siempre ha sido muy pacífica, pero cuando no somos escuchados hay que cambiar un poco las estrategias y ahí veremos cómo avanzamos“, agregó.
Alrededor de 100 mil hectáreas perdidas
En caso de que el proyecto de Garabí pueda llevarse a cabo, según señaló el Movimiento de Afectados por las Represas de Brasil (MAB), este sería el mayor complejo hidroeléctrico de América Latina, anegando un área de más de 99 mil hectáreas y afectando directamente a 12.600 personas de 19 localidades brasileñas de Rio Grande do Sul y 16 municipios argentinos, en Misiones y Corrientes.
“Lo que pasa es que hoy ya no se habla solamente del impacto sobre esas tierras que en teoría quedan bajo agua, tenemos que entrar a hablar del concepto de cuenca, que es mucho más amplio que el cauce del río”, porque “más allá de las tierras inundadas, el impacto social que es terrible“, comentó Luján.
“En el caso del río Uruguay la mayor parte de la población afectada son rurales, gente que vive de la chacra, y la perdida sería monstruosa, tanto desde los emocional como de lo económico“, puntualizó.
Los integrantes de la Mesa Provincial No a las Represas continúan reuniéndose de manera online, a la expectativa de cual será la resolución de la justicia brasileña. “Después avanzaremos con la idea de que no tengamos que estar siempre especulando si esto se renueva o no“, contó Luján
“Vivimos en la provincia declarada Capital de la Biodiversidad, tenemos por debajo de nuestra tierra una de las reservas de agua dulce más grandes del planeta, tenemos dos de los ríos más caudalosos y excepcionales del mundo, me parece que tendríamos que ya definir que provincia queremos, y si lo que queremos es esa preservación biológica no podemos estar corriendo riesgo de que nos construyan una represa“, reflexionó.
Es por esta razón que desde la Mesa Provincial No a las Represas han presentado en la Legislatura misionera dos proyectos que van en esa dirección, “para que se prohíban la construcción de represas en Misiones“, y “pidiendo que se le ponga fecha al plebiscito“, aunque ninguno ha sido tratado hasta la fecha.
“Pero me parece que esa son cosas que van a tener que definirse a corto plazo, porque el 90% de los misioneros no quieren represas, pero el 90% tampoco quieren que cada 2 o 3 años tengamos que estar movilizándonos, no para evitar que las construyan“, cerró.
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