Entre el 28 de febrero y el 1 de marzo se celebra el Carnaval en todo el país, y con ellos llegan los primeros feriados del 2022. Para el sector turístico esto significa cuatro días de mucho movimiento, algo siempre bienvenido luego de los últimos tiempos de vaca flacas a raíz de la pandemia.
En ese sentido, la provincia se prepara para recibir a turistas de distintas partes del país. “Tenemos muy buenas expectativas, el fin de semana del carnaval es desde hace varios años un fin de semana que anda muy bien, desde que se impuso estos feriados la verdad que fue un gran acierto para nuestro rubro y es como el cierre de la temporada de verano, que por suerte fue muy buena para nosotros después de dos años para olvidar“, señaló Gustavo Alvarenga, titular de la Asociación Misionera de Hoteles, Bares, Restaurantes y Afines (AMHBRA).
El fin de semana de carnaval comienza a marcar el cierre de la temporada de vacaciones veraniegas, y a partir de marzo para Alvarenga “empieza la verdad de la milanesa“.
“Termina lo que es temporada de verano, donde la gente por varios factores eligió Argentina para vacacionar y donde el PreViaje ayudó mucho para que el argentino recorriera el país, todos esos factores ayudaron. Ahora en marzo, cuando se acaba la temporada, vamos a ver cómo empieza a funcionar lo que es el turismo corporativo, el comercial y el tema de eventos, así que son dos facetas diferentes pero a partir de marzo tenemos todo el año para ver como se comporta“, explicó en diálogo con FM 89.3 Santa María de las Misiones.
Por otra parte, el empresario hotelero recordó lo duro que fueron los últimos dos años, donde la actividad fue prácticamente nula en 2020 y con apenas una ligera reactivación en 2021, y celebró que las medidas sanitarias, la llegada de la vacuna y un descenso en los casos de COVID permitió recuperar un poco de normalidad en el sector. “Nosotros sabíamos de un principio que la vacuna iba a ser un gran aliado para que nuestro rubro, tanto el gastronómico como el turístico, empiece a despegar. Esto sucedió, la gente se siente más segura con la vacuna, empieza a viajar más y por suerte se vio el fruto este verano“, señaló, aunque reconoció que “todavía nos falta mucho camino para recorrer después de estar mucho tiempo parados”.
En lo que respecta al rubro gastronómico, el titular del AMHBRA señaló que, a diferencia de otros puntos de la provincia, Posadas se vio favorecida por el cierre de fronteras. “El cierre del puente le favoreció mucho y hoy vemos una oferta con mucha más calidad y cantidad que antes de la pandemia“.
“Hoy la gastronomía se volvió algo fundamental. Era inimaginable hace dos o tres años pensar en la oferta que tenemos hoy, vinieron muchas franquicias de afuera, y los dos puntos estratégicos de la costanera se volvieron un boom en lo que es la gastronomía, la zona de El Brete o el corredor gastronómico, y hoy con la gran apuesta que se está haciendo en Costa Sur“, destacó.
“Posadas cambió, ya no es la misma ciudad de hace un par de años, está dando un vuelco impresionante y nos tenemos que aggiornar a eso”
Falta de personal
Alvarenga contó que, durante los meses más difíciles de la pandemia, en la provincias no se dieron grandes despidos en el rubro, pero que debido a los largos periodos de tiempo que debieron permanecer cerrados, “mucho personal específico del rubro gastronómico-hotelero, emigró para otro rubro que por ahí estaba mejor durante la pandemia. Entonces hoy es un problema en Argentina empezar a conseguir personal otra vez“.
“El turismo y la gastronomía siempre necesita personal en forma masiva, en nuestro rubro la máquina no remplaza al empleado, nosotros necesitamos una mano de obra y por ahí es difícil conseguir gente que haya estado en el rubro, entonces tenemos que empezar a trabajar otra vez sobre la capacitaciones, a formar otra vez. No es fácil perder un personal de años que ya viene capacitado“, indicó.
En ese sentido, destacó que en la provincia no hubieron cierres de establecimientos masivos y que sí se hizo un esfuerzo enorme para poder mantener a los empleados a costas de quedar muchas veces endeudados. “Podes reemplazar un televisor, podes reemplazar puertas y ventanas, pero reemplazar el personal es muy difícil“, dijo.
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