En la provincia se generó una preocupación en el ámbito deportivo y entre los profesionales de la educación física tras conocerse dos casos de personas que fallecieron mientras entrenaban en un gimnasio. Entre las recomendaciones, aseguran que primero deben hacerse un chequeo médico completo, sumado a contar con un entrenador capacitado para organizar las rutinas de ejercicios.
A su vez, alertan que el consumo de suplementos para aumentar masa muscular es una práctica habitual, pero que tiene consecuencias en la salud.
Por este motivo, piden a la población tomar los recaudos necesarios, acudir al médico y cuidarse de manera adecuada. Además, piden más controles en los gimnasios, ya que actualmente la habilitación solo tiene pautas sobre las condiciones que debe tener el espacio físico del local.
Sin controles
En comunicación con FM 89.3 Santa María de las Misiones el deportólogo y especialista en Gastroenterología, Horacio Melo, comentó que la actividad física “cuando es bien realizada no tiene contraindicaciones”.
Sin embargo, analizó que “no hay controles y la gente quiere hacerlo todo y de golpe”. En este sentido, alertó que en muchos gimnasios “no hay exigencias en la habilitación para que haya un médico que supervise o que los clientes tengan ficha médica”.
Por ello, apuntó a una cierta “irresponsabilidad por parte de los alumnos, que quieren hacer muchas cosas. También, varios gimnasios están manejados por instructores que hacen cursos de dos años, cuando es muy difícil controlar 50 a 100 personas”. Sumado a esto, indicó que quienes supervisan los entrenamientos “pueden ser personas no idóneas, lo cual es otro gran problema que estamos teniendo”, agregó.
Al momento de iniciar una rutina física, Melo recomendó que “previamente debiera ir a su médico clínico o cardiólogo, pedir un análisis de laboratorio, electrocardiograma y sería conveniente una prueba de fuerza “ergometría o ecocardiograma”. Aclaró que, estos estudios, “dependen de la edad y de la persona, si tiene una patología o no”, añadió.
Cuando no se realizan chequeos permanentes, aseguró que “puede haber personas que sufren hipertensión o diabetes y no lo saben”. Más allá de los ejercicios, “en la mayoría de los gimnasios ofrecen productos para perder grasa, mejorar la masa muscular y el rendimiento. Esos son productos que, en algunos casos, tienen esteroides, que puede afectar cardiovascularmente, renal o generar otros problemas”.
El deportólogo explicó que también influye el tema del precio, cobrar un costo extra y todo ello genera una baja en la exigencia: “A veces está un solo profesor para 20 personas y eso no puede ser”.
Entre las posibles soluciones, analizó que deberían aplicarse más controles en las habilitaciones: “Tiene que haber un responsable, no esperar a que sucedan cosas para recién ahí ver qué se puede hacer”.
Para la gente mayor
Para estar saludables en todas las edades, Horacio Melo señaló que “se pregona que cualquier persona mayor de 40 años y más, de 60 o 70 años, debería ir a un gimnasio para no perder su masa muscular, ganar estabilidad y autonomía”. Sucede que “la pérdida de masa muscular después de los 40 años se puede detener, revertir y mejorar con un buen plan, con un gimnasio y plan alimentario, para lograr mejor rendimiento y menos gastos en las obras sociales, así como en el Estado”.
Ejercicio, alimentación y descanso, hábitos a fomentar en los niños
En comunicación con FM 89.3 Santa María de las Misiones la especialista en Cardiología y Medicina Deportiva, Andrea Saldívar, explicó que, a la hora de la actividad física, “en los chicos debemos tener en cuenta sus fases biológicas, que van marcando nuestra evolución”.
En los más chicos, “la actividad física es un juego y la motivación debe ser esa. Después, se van creando hábitos de acuerdo al desarrollo, crecimiento y cada etapa va teniendo una capacidad motora para la entrenabilidad”. Para lo deportivo, compartió que “lo ideal sería unas tres veces a la semana y de unos 60 minutos”.
Incentivar el movimiento en las infancias “es donde sembramos la semilla para un futuro saludable”. Para ello, analizó que “no es solo el club, la escuela, sino la familia donde se inculcan los hábitos, porque hablamos de futuros adultos saludables”, agregó.
Andrea Saldívar recomendó no solo incentivar la actividad física “sino también otros pilares, como la alimentación y el descanso. Los chicos tienen otro gasto energético que es el colegio, donde el secundario tiene otras demandas”.
En su experiencia, contó que “cuando los padres traen a los chicos para una evaluación deportiva, también miró a los padres. Ahí vemos antecedentes que vienen de los familiares, con padres con sobrepeso, con obesidad”.
En Argentina, “en la última encuesta de factores de riesgos sabemos que hay más obesidad, sobrepeso y diabetes. Vivimos más, pero con más enfermedades crónicas y debemos ajustarnos desde estas etapas tan importantes”, relató la doctora.
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