El 3 de junio próximo se cumplen cinco años de las trágicas muertes de Víctor Javier González y Juan Mendoza, ambos de 19 años, quienes tuvieron la desgracia de pinchar una goma en la ruta nacional 105, cuando iba a un encuentro de motos en Apóstoles, y fueron atropellados por un auto.
En ese marco, el lunes 29 de mayo comenzará el juicio oral y público para juzgar a Gabriel Pana, quien conducía el Chevrolet Agile que impactó y mató a los jóvenes que empujaban la moto pinchada a la vera de la ruta aquella madrugada de 2018.
El debate se llevará a cabo en el Juzgado Correccional y de Menores Nº 1 de Posadas, a cargo de la magistrada Marcela Leiva.
Con esta premisa, la cantante local Vanessa Avellaneda, madre de Víctor, habló con FM 89.3 Santa María de las Misiones quien pidió acompañamiento. “Por la memoria de mi hijo y de su amigo, necesitamos que se haga justicia”, expresó.
“Yo quiero que salga la luz todo, yo necesito que se haga justicia y que este chico que cometió el error, como todos en la vida cometemos errores y los pagamos de alguna manera u otra, lo pague”, dijo.
Al consultarle sobre cuál sería la sentencia justa, expresó que “la palabra no sería justa, porque justo sería que vuelva mi hijo”.
Referido a la pena, dijo que “se pidió 15 años por la muerte de cada chico, son 30. Yo creo en la justicia divina, siento que Dios me va a acompañar en este juicio”.
Vanessa contó además que se interiorizó estos últimos años en la justicia penal y lo atribuyó a que “el tiempo cura las heridas”, porque antes “yo no quería ni hablar del juicio, no quería hablar con los abogados, no quería hablar con nadie, no quería saber nada de nada”, dijo.
Fue tajante y apuntó que “yo quiero que el chico esté en la cárcel. Yo quiero que el chico cumpla condena. No le vi en estos cinco años, la cara no la conozco (…) Yo todavía no tuve ni siquiera el pésame del chico que chocó a nuestros hijos”, contó.
“Me quedo con los mejores recuerdos de él, siento que la vida a veces a algunos les arrebata la vida, otros tenemos un cronómetro que dice ‘este es tu tiempo en esta tierra’ y trato que mi corazón lo entienda. La música sanaba mucho mi corazón, ha sanado mucho mi alma y mi hijo cantaba conmigo. Yo quiero que se haga justicia. Yo le prometí que cuando terminaba el juicio iba a liberar sus cenizas”, manifestó entre lágrimas.
El sueño de Víctor
Seguidamente, Vanessa contó que crió a sus tres hijos sola. Víctor era el del medio, además están Lautaro (11) y Maxi (26).
En ese sentido, contó que el joven fallecido tenía intenciones de seguir los pasos de su hermano mayor en la Policía Federal, “me quedé con todos sus títulos, sus cursos, su mundo, su vida estructurada”, lamentó.
Contó que desde chiquito Víctor fue un apasionado de las motos. “Él se quería ir al encuentro de motos, eran los sueños que teníamos y sabíamos que el encuentro de moto Apóstoles era uno de los más lindos de la provincia”, pero ese día “se me escapó y se fue con su moto”, recordó.
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