La Provincia cumplió este jueves con la promesa sobre la asignación de recursos para montar la primera planta fraccionadora de azúcar en Mojón Grande, que beneficiará a toda la cuenca cañera en esa región.
Entrevistado por FM 89.3 Santa María de las Misiones, el intendente local, Adrián Solís, se mostró feliz sobre las prontas acciones gubernamentales.
Cabe recordar que el domingo último, en el marco de una visita oficial del gobernador Oscar Herrera Ahuad, a la primera Fiesta Provincial del Azúcar Rubio, que tuvo lugar en esta localidad, el mandatario provincial tuvo un mano a mano con los productores a quienes prometió la creación de una línea de montaje que operará con la Cooperativa Agrícola Mojón Grande Limitada para promover la generación de una mejor fuente de ingresos para los productores.
El procesamiento del azúcar rubio es una salida al mercado mucho más eficiente y mucho más segura en la cadena alimenticia, había señalado el mandatario en su visita.
La obra, cuyos trabajos comenzarán la semana entrante, significará una ayuda concreta para los 60 productores que desarrollan la tarea en Mojón Grande. La localidad es la que más empleo da a los productores de azúcar rubio.
“La mayoría aquí en las zonas son familias productoras. Hay otros municipios que también tienen cañeros pero en una cantidad relativamente menor de número de productores y menos cantidad de kilos de producción por año”, apuntó.
En lo que corresponde a Mojón, más o menos se está llegando a unos 800 mil kilos de azúcar rubio anuales.
“Las cifras son variables, en cada zafra, pero el promedio se ubica más o menos ahí”, se explayó.
Durante la visita de ayer, estuvo presente el ministro de Industria Nicolás Trevisan para la charla de trabajo con los funcionarios. Oportunamente el funcionario explicó que a través de esta nueva planta la cooperativa podrá vender, en un próximo paso, sus productos “al supermercado o a las cadenas especializadas, como las dietéticas o cadenas saludables, desde la cooperativa”, ampliando el margen de ganancia actual del producto, según indicó el titular de la cartera de Industria en la provincia.
Estas acciones van en consonancia con el Programa de Mejoramiento de Salas de Producción de Azúcar Rubio que incentiva la Provincia, entregando materiales de construcción y brindando el asesoramiento técnico, a través del Instituto de Fomento Agropecuario e Industrial de la Provincia.
Rudimentario
En la actualidad, la forma de trabajo de los cañeros es muy rudimentaria. Cada uno se las arregla como puede en sus chacras, donde tienen “sus mini industrias”, contó el intendente Solís.
Y agregó: “Allí realizan la primera parte del proceso productivo en sí: extracción del jugo de la caña, la cocción y tamizado para llegar a los gránulos de azúcar. Eso lo venden a granel, en bolsas de entre 20 y 25 kilos. Como no tiene demasiado valor agregado, es decir, implica mucho trabajo pero falta ese valor agregado. Esas bolsas se comercializan entre los acopiadores, que tienen el mercado concentrado y por ello manejan el precio”.
Al respecto de la planta en sí, el jefe comunal de Mojón Grande explicó que se comenzará a trabajar sobre la puesta en marcha de una sala fraccionadora y envasadora. Con ello, a través de la cooperativa del pueblo, podrán entrar al mercado mientras es administrada por los mismos productores, a los fines de no tener que depender más de los acopiadores.
“Entendemos que de esta manera, se va a vender al consumidor final o a las grandes cadenas consumidoras, a un valor superior al que actualmente reciben”, redundó.
Un aspecto importante es que el beneficio no será sólo para la localidad donde se instalará la planta sino que se llegará a toda la cuenca productora de azúcar rubio.
La planta será construida en un terreno adquirido por la Municipalidad, sobre ruta provincial terrada. Cuenta con la infraestructura necesaria , con respecto a los servicios de agua y luz y aunque la obra no se llegará a concluir en la presenta zafra que se extiende hasta noviembre, la proyección es contar con ella para la primera zafra de 2023.
“Los productores no llegan por sí solos al mercado. La planta le otorgará registro oficial y una marca propia”, finalizó Solís.
La fraccionadora será sinónimo de mayores ganancias
Según un detalle minucioso sobre la nueva planta, se espera que aporte beneficios a toda la cuenca cañera. Sólo en Mojón Grande hay unos 60 productores cañeros que venden su producción a granel a los acopiadores.
“Entre todos producen alrededor de 800 mil kilos por año y diez de ellos son socios fundadores de la cooperativa. Una vez activa la planta, no sólo podría duplicar lo producido, sino que ya no estarán a merced de los compradores en cuanto al precio que pretendan pagarle”, comentó el intendente Solís a PRIMERA EDICIÓN.
“Con la planta se espera evitar depender de los acopiadores, que son quienes ponen el precio a granel, para así llegar directamente a los supermercados con una marca propia; lo que permitirá lograr un mayor margen de rentabilidad”, enfatizó.
Para la Provincia, en tanto, la puesta en marcha de la planta implica el puntapié para incentivar la reconversión del sector, que actualmente vende toda la producción al Ingenio Azucarero de San Javier que procesa azúcar blanco o tradicional. Asimismo, significará orientar la producción a un nicho vinculado con la tendencia del mercado a un mayor consumo de lo natural.
El azúcar rubio o azúcar moreno se obtiene de la cristalización del jugo de caña de azúcar, pero no se procesa ni refina. Por lo tanto, al no ser refinada con los químicos necesarios para “blanquearla”, el producto no pierde ninguno de sus nutrientes, y esto la convierte en una opción mucho mejor que el azúcar blanco para el consumo.
El objetivo que busca la Provincia con estas inversiones es el de insertarse lentamente este nicho con un producto misionero que a los productores les dejaría un mayor margen de ganancias, y se especula que crecerá el volumen de la producción.
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